Medicina Hiperbárica
Historia de la Medicina Hiperbárica
La Medicina Hiperbárica es conocida desde hace más de 300 años, aunque los documentos anteriores a 1960 solo tienen valor histórico o anecdótico. En 1662 el clérigo británico Henshaw (fisiólogo y médico) intuye que el aumento de la presión del aire podía aliviar algunas lesiones agudas. Sin ninguna base científica, construye una cámara a la que llama «Domicilium» que no modificaba demasiado la presión, pero fue la primera. La idea de Henshaw fue aplicada más tarde en distintos países europeos para mejorar la salud en los llamados Baños de Aire comprimido, ya que los pacientes respiraban aire a presión, en vez de oxígeno, peo aumentando la presión del aire, se aumenta la presión parcial del oxígeno. Aunque este aumento resultaba beneficioso, los médicos que aplicaban el tratamiento no podían explicarlo.
En 1834 el médico francés Víctor T. Junod construye una Cámara Hiperbárica para tratar afecciones pulmonares. En 1774, Joseph Priestley aísla oxígeno en estado gaseoso, aunque este hecho también les ha sido atribuido con cierto fundamento, a Carl Wilhelm Scheele y Antoine Lavoisier. Entre 1837 y 1877 en varias ciudades de Europa (Berlín, Ámsterdam, Bruselas, Londres, Viena y Milán) se abrieron los llamados Centros Neumáticos» entre los que sobresalió el fundado por Bertini en Montpelier. En 1837 el cirujano francés Charles Gabriel Pravaz construye una Cámara Hiperbárica capaz de tratar a 50 pacientes. En 1879 el cirujano francés Fontaine, construye un quirófano sobre ruedas capaz de presurizarse y en el que se podían realizar más de 20 procedimientos quirúrgicos utilizando óxido nitroso como anestésico.
En 1921 Orville J. Cunningham, profesor de anestesia en la Universidad de Kansas, observa que pacientes con problemas cardíacos y alteraciones circulatorias que se sentían mal viviendo en las montañas, mejoran a nivel del mar demostrando que aumentar la presión parcial del oxígeno es beneficioso para tratar estados hipóxicos. Uno de sus pacientes, el Sr. Timken en agradecimiento a su tratamiento renal, le construye en agradecimiento la mayor Cámara Hiperbárica del momento: 5 pisos de altura y 19,5 m de diámetro. También llamada «hospital de bola de acero», ubicad en Cleveland (Ohio), podía presurizarse hasta 3 ATA. En 1930, la Asociación Médica Americana y el Colegio de Médicos de Cleveland, le obligan a cerrar por carecer de base científica alguna en sus tratamientos. Lamentablemente, la Bola de Acero fue desmantelada durante la Segunda Guerra Mundial, para utilizar sus materiales. La historia de la Medicina Hiperbárica Científica empieza con dos nombres: Paul Bert (1833-1886) y John Scott Haldane (1860-1936). En 1878, Paul Bert publica su obra «La Pression baroméetrique: recherches de physiologie», donde describe los resultados de someter al organismo a variaciones de la presión atmosférica y de la presión de oxígeno. Se refiere también a la Hipoxia y a la Hiperoxia. Los experimentos realizados por Paul Bert, demuestran que respirar elevadas presiones parciales de oxígeno acaba por provocar convulsiones. Esta toxicidad que sufre el Sistema Nervioso Central se denomina Efecto Paul Bert.
John Scott Haldane, fisiólogo escocés, es considerado el padre de la Teoría de la Descompresión moderna. Haldane fue el primer científico en aplicar la ciencia para predecir los resultados de la descompresión y sus métodos forman la base de la mayoría de las teorías de la descompresión modernas .
Haldane funda la revista «Journal of Hygiene» donde publica en 1908 el primer juego de Tablas de Descompresión de la historia. En 1936 Haldane muere de neumonía. Las conclusiones de sus estudios fueron aceptadas en todo el mundo y se convirtieron en la base de las operaciones de los buzos en Gran Bretaña y en otros países. En 1912, la U.S. Navy también las adoptó como base para sus operaciones de buceo y las mantuvo en uso hasta 1956.

Hospital «Bola de Acero»

Paul Bert y John Scott Haldane
En los años 50, varios cardiocirujanos, entre ellos el Dr. Christian Barnard, empiezan a utilizar el oxígeno hiperbárico en intervenciones de valvulopatías congénitas o adquiridas y en enfermedad coronaria, ya que necesitan aumentar la presión parcial de oxígeno en sangre. El Dr. Churchill Davidson en Inglaterra, fue el primero que en 1955 empieza a utilizar la oxigenoterapia hiperbárica para potenciar el efecto de irradiación en los pacientes oncológicos.
El uso científico moderno de las Cámaras Hiperbáricas se inicia con los trabajos del Dr. Ite Boerema, profesor de Cirugía de la Universidad de Ámsterdam, quien propuso usar el oxígeno hiperbárico para aumentar la tolerancia al paro cardíaco por los pacientes. Las primeras investigaciones se llevaron a cabo con animales en el tanque hiperbárico de Dan Helder. Experimentos llevados a cabo en cerdos, demostraron que inhalando oxígeno a una presión de 3 ATA podían sobrevivir por períodos de 15 minutos, con tan solo 0,4% de hemoglobina, ya que sus cuerpos se saturaban de oxígeno disuelto en plasma y cunado volvía a presión atmosférica y se les restituía la sangre, los cerdos sobrevivían. Acerca de este experimento, el Dr. Boerema publicó un trabajo denominado «La vida sin sangre» que tuvo una repercusión trascendental.
En 1959, se construyó en el Hospital Wilhelmina Gasthuis de Amsterdam, una gigantesca cámara de acero que contenía un quirófano que podía presurizarse a 3 ATA en cuestión de 12 minutos. Disponía de una antecámara, donde se presurizaban médicos y enfermeras para entrar y salir del quirófano sin despresurizar al paciente. El 25 de octubre de 1960, se realizó el primer tratamiento con éxito a un paciente con gangrena gaseosa, y se trataron casos de congelación, fracturas, y exceso o colgajos de piel.
En la antigua URSS, el desarrollo de la Medicina Hiperbárica fue muy importante gracias al cardiocirujano Dr. Nikolai Amosov y al Dr. Boris Petrovsky también cardiocirujano y Ministro de Salud Pública. En 1974 se crea un barocentro en Moscú con 6 cámaras hiperbáricas multiplaza ubicadas en el Instituto Científico de Cirugía Clínica y Experimental, realizándose más de 1000 intervenciones quirúrgicas entre los años 1974 y 1990. La Medicina Hiperbárica tiene hoy una gran difusión en Rusia, y en Estados Unidos, donde el número de Cámaras Hiperbáricas es casi de 600, una cuarta parte de ellas emplazadas en los últimos 5 años.
En 1967, se crea en Estados Unidos la fundación Undersea and Hiperbaric Medical Society (UHMS), encargada de la aprobación de las condiciones médicas relacionadas con la oxigenoterapia hiperbárica. La European Underwater and Baromedical Society (EUBS) fue fundada en 1971 y actualmente trabaja en conjunto con el European Committee for Hyperbaric Medicine (ECHM) para integrar los conocimientos de la Medicina Hiperbárica en Europa y dictar las normas de aplicación de esta especialidad. La difusión de la Medicina Hiperbárica en Europa es amplia en Noruega, Inglaterra, Finlandia, Italia, Francia, Alemania, Austria, Grecia, Portugal y España. También está muy desarrollada en otros países como China, Corea, Australia, India, Turquía, Japón, Cuba y Argentina.

Dr. Ite Boerema

Dr. Nicolai Amosov

Dr. Boris Petrovsky
La Medicina Hiperbárica y las primeras aplicaciones clínicas de las Cámaras Hiperbáricas en España comienzan en 1923 al adquirir la Armada Española una Cámara Hiperbárica multiplaza, que se utiliza de modo regular hasta los años 60, para el tratamiento de la enfermedad de descompresión de buzos civiles y militares.
Las Cámaras Hiperbáricas a nivel civil se adquieren a partir de 1970 para muchos de los hospitales de la Seguridad Social. La razón se debió a la presentación de un cuadro de «gangrena gaseosa» en una paciente ligada al «establishment». Las Cámaras Hiperbáricas adquiridas fueron modelos monoplazas fabricadas en el Reino Unido, algunas de las cuales están todavía en uso; su aplicación ha quedado reducida a procesos agudos puntuales (Envenenamiento por CO, Gangrena gaseosa, etc.) sí bien debe destacarse la inmensa labor realizada por médicos entusiastas de algunos Hospitales como el Hospital Universitario Virgen del Rocío en Sevilla, el Hospital Universitario y Politécnico La Fe en Valencia, el Hospital Universitario La Paz en Madrid, el Hospital A Coruña y el Hospital Ortiz de Zárate en Vitoria. En la actualidad, la mayoría, están infrautilizadas tanto por problemas de mantenimiento como por desconocimiento bibliográfico.
La Armada española dispone desde mediados de los años 60, de personal especializado en tratamientos hiperbáricos. En 1970 se construye el Centro de Buceo de la Armada en Cartagena y se adquiere una Cámara Hiperbárica de la casa «Dräger» en la que además de buceadores, comienzan a tratarse entidades clínicas diferentes a las del buceo. Pionero en éste campo fue el Dr. Antonio de Lara Muñoz-Delgado quien junto al Dr. Cutillas publica en 1972 los primeros resultados de pacientes tratados en Cámara Hiperbárica y que presentaban vasculopatías periféricas.
En España, tenemos diferentes Cámaras Hiperbáricas repartidas por todo el país, destacando entre otros el Hospital Universitario Marqués de Valdecilla en Santander, el Hospital el Ángel en Málaga o el Hospital Central de la Defensa «Gómez Ulla» en Madrid. También existen multitud de Cámaras Hiperbáricas Monoplaza ubicadas en Centros y Clínicas privadas, aunque una buena parte no cumple con la Legislación vigente y carecen de la certificaciones necesarias para productos sanitarios.
Si es usted un paciente y necesita un tratamiento de Oxigenoterapia Hiperbárica, puede consultar los Centros de Medicina Hiperbárica avalados por la Sociedad Española de Medicina Hiperbárica utilizando el botón Centros Hiperbáricos. Gracias